Hay mucho que preparar para que la vuelta al cole sea todo un éxito. Te contamos todo lo que necesitas para que su visión sea una herramienta perfecta en su nuevo curso

La visión juega un papel fundamental cada día para un estudiante, ya sea para las clases, el deporte o el ocio. Por eso, empezar con buen pie les permitirá no perder ni un segundo en disfrutar de todo lo que les rodea, y que determinará sus resultados finales.

Comprobaciones previas al curso

Comenzar el curso con una revisión nos garantiza conocer si su sistema visual está lo suficientemente preparado. Así, podrá afrontar la exigencia de las clases, el ordenador, la pizarra y todas las actividades que le esperan. En muchas ocasiones, los niños no son conscientes de sus limitaciones visuales. Ellos no tienen con quién compararla, así que creen que su visión es normal.

Uno de cada cinco niños en edad escolar convive con una visión borrosa, sobre todo cuando realiza tareas en visión cercana, como la lectura y escritura. Una revisión a tiempo nos permite realizar una graduación de miopía, hipermetropía o astigmatismo, para que no disminuya su rendimiento escolar.

Problemas frecuentes en la visión de los niños

Estos son algunos de los problemas a los que se pueden enfrentar los niños durante el curso:

  1. El más frecuente es el ojo vago, o ambliopía. Una disminución de las facultades visuales en un ojo (o en los dos).
  2. En segundo lugar, puede sufrir una insuficiencia de convergencia. Consistente en una coordinación divergente de los músculos del ojo cuando observa objetos cercanos.
  3. También puede ser común el estrabismo. Un error en la alineación ocular que debe tratarse lo antes posible para un correcto desarrollo de las habilidades visuales.
  4. También deberíamos descartar la amplitud de acomodación, la convergencia ocular, la flexibilidad acomodativa, o la supresión ocular…

Existen otros factores relacionados con la visión binocular que no son sencillos de detectar, en unos casos porque el desvío del ojo no siempre resulta evidente, y en otros casos porque solo se observa ocasionalmente.

¿Cómo puedo darme cuenta de que mis hijos ven correctamente?

Puedes observar algunos indicadores que te permitirán saber si su vista es tan eficaz como necesitan:

  • Comprueba si evita tareas relacionadas con la visión de cerca o que le exigen fijarse en el desarrollo de algunas tareas.
  • Observa si le resulta difícil leer, si omite o confunde letras o palabras, si emplea el dedo para seguir las líneas, repasa una y otra vez lo leído, si fuerza su postura o si se acerca demasiado al libro.
  • La forma en la que escribe puede indicarnos un problema oculto de visión.
  • Si se frota los párpados a menudo, o si se esfuerza en fijarse poco tiempo después de comenzar la lectura.
  • Si ladea la cabeza puede indicarnos que está usando un solo ojo para leer.
  • El enrojecimiento ocular, picor o exceso de lágrima sin motivo aparente puede indicarnos que algo no funciona como debiera.
  • Si tiene con frecuencia dolores de cabeza o mareos.
  • Finalmente, si no calcula bien las distancias o la profundidad, así como si tiene dificultades para seguir los objetos en movimiento.

El mejor momento es ahora

Si has observado en tus hijos alguno de estos síntomas, recuerda que cuanto antes podamos intervenir, más tiempo disfrutará de una visión óptima.

Contacta con nosotros, o pide cita para hacer una revisión completa. También puedes llamarnos al 987 23 23 45 y le atenderemos cuanto antes para que disfrute del nuevo curso, y de todos los demás.